Banda Sonora

Todas y cada una de las personas en el mundo viven su vida bajo un determinado ritmo y ese ritmo varía dependiendo de del momento o circunstancias que tienen que afrontar, mi vida en particular tiene muchos ritmos pero todos o casi todos giran en torno al rock, a artistas fundamentales en mi colección de discos. Y hoy es el día que elegí para homenajearlos a todos, para recordar lo bueno y lo malo vivido gracias a la Banda Sonora de mi vida.
Es raro que cuando me pongo a pensar en un video que me atraía cuando era chico, resulta que a la larga me di cuenta, que desde ese entonces cuando veía a un niño corriendo en un cementerio, ya estaba escuchando la música de Fito Paez, ya comenzaba a conocerlo, tiempo después también escuche a la mítica banda boliviana Lou-kass y comenzaba a inclinarme hacia el rock como género de música que marcaría los ritmos de mi vida.
La época escolar comenzaba y con ella, el mundo me inducía al pop y una radio, me ofrecía pop mexicano, que no merece ser nombrado, aun estaba un poco inmaduro para poder decidir sobre una corriente a futuro, sin embargo entre tanto pop aparece una ves mas Fito Paez y su “Mariposas Technicolor”, el rumbo comenzaba a delinearse y el primer artista del rock argentino se convertía en un favorito, su disco “Circo Beat” fue el primer casette que llegue a tener y que aun lo tengo, lo escucho y definitivamente es uno de los mas importantes.
Luego vino Sui Generis y la poesía clásica, realmente mientras estaba en colegio no hubieron momentos marcados por las canciones, aunque si se recuerdan con mucho cariño canciones como “Epilogo” de Llegas, los discos “Euforia” y Enemigos Íntimos” de Fito Paez y sobre todo el gran regreso de Lou-kass el 99 y los tres discos que grabaron y los obtuve.
Luego llego la universidad, con ella el disco “El Pesanervios” donde Rodrigo Villegas unía a varios de los músicos mas grandes de Argentina; “Subterranea” marcaba momentos de viajes a ningún lado, cuando las tardes se ponían grises y caía lluvia sobre la ciudad, era un momento de hacer una retrospectiva del trabajo de Llegas, “Desapareciendo” se convirtió en casi un himno para Alejandro y para mi y “La Despedida” de Fito ya hacía estragos en mi corazón, al final de aque año ya estaba iniciando cada nuevo año escuchando “La Buena estrella” de Paez, un himno a las grandes esperanzas, al pensar que las cosas por muy mal que estén, deberán mejorar, porque alguien nos cuida y nos guía desde arriba.
Las canciones de Fito ya inspiraban mis videos y mis guiones, mientras tanto el rock en ingles también se aferraba a mis sentidos, conociendo y reconociendo bandas como Linkin Park, Nirvana, POD y otra más que llenaban los espacios de la radio Stereo 97, hasta que llego a mi vida Paty y hubieron mas inclinaciones por el rock argentino, inclinaciones que se fortalecieron con Anahi, descubriendo una página de rock argentino y escuchando canciones de grupos que hasta ese momento eran desconocidos para mi.
Anahi indujo un gusto especial por Bersuit, que si bien ya los conocía, no me gustaban mucho, pero a la larga terminé dándoles el beneficio de la duda, “Hecho en Buenos Aires” fue el mas grande nexo, Bersuit poco a poco se convirtió en ese homenaje eterno a Any, porque gracias a ella los conozco y los admiro, porque muchas de sus letras marco nuestras vidas, porque lloré su despedida junto a “Convalecencia en Valencia”, pero sobre todo porque a ella le gusta, y a mi me gusta precisamente por eso, porque Anahi es fiel admiradora de ellos, es por eso que cuando tuve la oportunidad de ir a verlos y sabía que Anahi no podría hacerlo le llame para hacer que escuche dos de las canciones que mas nos marcan “Mi Caramelo” y “Un pacto”, por eso no me tembló la mano ni la voz, para marcar su numero, por eso miraba su carita grabada en mi celular al escuchar y cantar esas canciones.
Pero como el mundo sigue girando había que buscar mas variedad y así llego a Bebe y muero de tristeza con “Razones”, porque Razones es un implícito tema del final de una historia y porque pese a haber terminado el mejor Carnaval de Oruro el 2007, al escucharlo llore inconsolablemente y Alejandro hizo lo que solo un buen amigo puede hacer en esos casos, callarse y dejar que llore por ultima ves esa canción.
Los viajes siempre tuvieron una canción especial, desde “La brujita” de Llajtaymanta en mi primer Carnaval en Oruro hasta “El viejo de Arriba” en el ultimo viaje que hice para visitar a mis primor de la tierra del Folklore. El disco doble “La la la” de Fito y Spinetta acompañó muchos de esos viajes pero sin lugar a dudad uno de los viajes mas recordados por mas de una razón fue marcado por Fabiana Cantilo, Andrés Calamaro y Miranda!, había llegado el feriado de Todos Santos del 2007, y era el momento de cumplir la promesa que había hecho a Britani, antes no podía dejar de pasar por Oruro, visitar a mis primos, para que esa noche parta a Sucre, con un disco especial era el homenaje de Fabi al rock argentino, “Donde manda marinero” fue una de las canciones de ese viaje, pero la mas fuerte sin lugar a dudas fue “Amanece en la ruta”, ya en la ciudad de Sucre el silencio de mi soledad estaba armonizado por “La lengua popular” de Andrés Calamaro sobre todo con “Carnaval de Brasil” y “Cada una de tus cosas”, donde la ultima sentenciaba que tengo un deseo cada ves que veo un tren, pues bueno, como aquí ya no hay trenes yo siempre tendré un deseo cada ves que vea una flota el poder estar arriba para dar un viaje, o que alguien importante baje de ella para verme; y “Nada es igual” de Miranda! marco lo que se venía, algo que pese a no querer tubo que pasar, porque Brito al final no sentía el mismo compromiso por mi, que el que yo sentía por ella.
Las navidades son épocas un tanto duras, es por eso que “Tus regalos deberían de llegar” de Fito las marcan, porque son una realidad, donde uno espera algo en Navidad y a la larga jamás se cumple, con esa canción también incluyo a “La gente que habla sola” de A77aque y a “Navidad” de Miranda!, el pasado año se incorporó a la lista de canciones depresivo navideñas “Cae la noche en Okinawa” de Fito.
Al parecer gran parte de mi colección está marcada por Fito, y es una realidad, Fito Paez es una especie de guía, de mentor y de válvula de escapa ante las circunstancias de mi vida, hoy hay muchas mas canciones que están llenando mis sentidos, pero para siempre las que escuchare en este y en los cumpleaños que vienen son las de Fito, así me detengo, me doy la vuelta y veo lo que viví hasta acá, tomo un respiro necesario y sigo hasta llegar a donde Dios quiere que llegue.
Porque la música siga contando mis historias de vida, y por que esas historias tengan menos sal y muchas mas sonrisas.

Con los locos, los borrachos y claro, la Bersuit

Después de dos días se sigue sintiendo rico el sabor en la boca del Festichelas, de las cervezas pero sobre todo de la música. Miranda como siempre, sólidos y demostrando que el pop lo llevan en la sangre, con poco tiempo para sus temas no tan conocidos, pero con el suficiente para tocar sus éxitos y para que Ale se muestre el torso al descubierto.

Luego Loukass, de lejos la banda mas grande en la historia del rock boliviano, con un sonido maduro, mas profesionales que antes, pero con la misma esencia que los hizo lo que son y lo que fueron, mezclando reggae con rock, y al final la infaltable Torcida, con un inicio muy jamaiquino y al final el clásico de todos los tiempos, el himno de Loukass en su versión original.

Finalmente llego el momento esperado por casi dos meses, en realidad por toda una vida, las luces se apagaron y salía el Pelado Cordero cantando Que pasó, luego El Viejo de arriba, y la emoción de un público que aunque fue compuesto en su mayor parte por gente que los estaba viendo por primera ves, los coreamos como si los conociéramos de toda la vida La Paz realizó un real Pacto con la Bersuit la noche del 3 de Octubre, con canciones muy celebradas, pedidos del público que por falta de tiempo no se cumplieron, pero al final el sueño estaba siendo cumplido.

En el momento más fuerte del concierto se comenzó a tocar Sr. Cobranza, y el “Pelado” se comprometió con el país denunciando que la oligarquía de Santa Cruz es mandada por el país del norte y dando paso a un rapero boliviano, para que le ponga su “llajwita” al rock argentino, y haciendo que de esta forma termine siendo rock Latino y que las fronteras no sirven de nada, que lo de ellos es nuestro y lo nuestro es para ellos.

Al final la fiesta invadió la Cancha del Mariscal Braum y la murga de Los Auténticos Decadentes puso a bailar a todos, cerrando así una gran noche, una noche de sueños cumplidos y de compromisos implícitos, el compromiso de que el Festimusic Paceña nunca se vaya de La Paz y de que la Bersuit venga nuevamente a Bolivia pero esta ves con su show completo, con sus cambios de vestuario, con los pogos y con todo lo que hace de la Bersuit una banda de culto no solo en Bolivia, una banda de culto a nivel internacional.